El Imperio Azteca fue una de las sociedades mesoamericanas más influyentes en la historia, y su cultura continúa siendo estudiada hasta el día de hoy.

La moda femenina en la civilización azteca jugaba un papel fundamental tanto en la vida cotidiana como en las ceremonias religiosas, pero ¿qué vestían? Desde intrincados sombreros hasta coloridas capas, aquí descubriremos ¿Cómo se visten las mujeres aztecas?.
También veremos algunos de los principios físicos básicos que han permitido que estas modas perduren durante siglos. Al examinar fuentes clave como obras de arte antiguas, manuscritos y artefactos arqueológicos, descubrimos una visión fascinante de un tiempo que ya pasó.
¿Como se vestian los aztecas mujeres?
Según los cronistas, las mujeres mexicas solían llevar dos prendas principales: una falda larga llamada cueitl (conocida actualmente como enredo) y una camisa larga y holgada llamada huepilli (conocida actualmente como huipil o hipil).
Se dice que el cueitl se confeccionaba enrollando una tela alrededor del cuerpo, en lugar de utilizar un cono como se hace en la actualidad. Esta falda se sujetaba a la cintura con un cinturón largo de tela que rara vez era visible.
En cuanto al huepilli, era una camisa larga con un cuello en forma de “V” o cuadrado. La camisa llegaba hasta las rodillas y se hacía con una sola pieza de tela cosida a los lados, lo que resultaba en mangas abiertas en la parte de la doblez.
Ambas prendas eran adornadas, y la complejidad y riqueza de los adornos dependían del tiempo y esfuerzo dedicados a su fabricación. En su mayoría, las mujeres las confeccionaban ellas mismas.
Sin embargo, en términos de capacidad económica, las pipilas tenían prendas mucho más lujosas y elaboradas, confeccionadas con finas telas de algodón.
¿Cómo eran las mujeres aztecas fisicamente?
Las mujeres aztecas de origen humilde solían tener una altura máxima de 1,45 metros, lo que daba la impresión errónea de fragilidad. En la sociedad azteca, las mujeres se veían limitadas por un entorno machista y militarizado.
Su destino estaba marcado por el cumplimiento de preceptos morales y obligaciones diarias. A las mujeres se les excluía de todas las actividades relacionadas con el poder y el prestigio. Debían ocuparse de sus esposos, hijos y de todas las tareas domésticas.
Culturalmente, se las descalificaba y se les exigía guardar silencio en presencia de los hombres, así como obedecer sumisamente todos sus deseos y órdenes. Sin embargo, también fueron un pilar fundamental para la unidad familiar, el trabajo y la práctica religiosa.
¿Cómo lucian los aztecas?
La vestimenta de los militares es la más reconocible cuando pensamos en la indumentaria de los aztecas, ya que cuenta con numerosos elementos decorativos.
Esta vestimenta era principalmente usada por los hombres, pero también incluía monos adornados, sombreros con formas de animales, chalecos de algodón y otras decoraciones que indicaban el rango que cada individuo tenía en el ejército.
¿Cómo se llama lo que usaban los aztecas en la cabeza?
La vestimenta y el peinado eran indicadores claros de la clase social a la que pertenecía un azteca. Estaba estrictamente prohibido para alguien vestir prendas propias de una clase social superior.
Los plebeyos utilizaban vestidos elaborados con fibras de maguey, mientras que solo los nobles tenían el privilegio de usar prendas de algodón, aunque este privilegio podía ser revocado si infringían la ley.
Los hombres en general llevaban un sencillo taparrabos atado por delante y un manto sobre el hombro. Cuanto más alto era el rango de una persona, más lujosos y adornados eran sus vestidos.
Los hombres comunes, conocidos como macehuales, iban sin cubrir, con el cabello largo, y generalmente usaban un taparrabos o maxtli, junto con un manto atado sobre uno de sus hombros y sandalias de cuero o tejidas con fibras de maguey cuando hacía frío.
Las mujeres llevaban una tela finamente tejida alrededor de la cintura, sostenida por un ceñidor delgado, y completaban su vestimenta con una camisa sin mangas o huipil. A veces trenzaban su cabello y lo adornaban con cintas que se enrollaban alrededor de la cabeza.
Este estilo de vestimenta femenina aún se encuentra en muchas partes de México. Los menos afortunados confeccionaban sus vestidos con fibras de maguey o algodón rústico, mientras que los ricos utilizaban telas más finas y elaborados bordados.
La variedad de nombres dados a las diferentes clases de mantas muestra su importancia y relevancia para quienes las utilizaban.
¿Cuántas mujeres pueden tener los aztecas?
Según López de Gómara, se dice que Moctezuma y Nezahualcóyotl tenían a su disposición hasta dos mil concubinas, y en cierta ocasión, Moctezuma mismo dejó embarazadas a más de cien mujeres durante el mismo periodo.
“Había alrededor de mil mujeres, y algunos afirman que hasta tres mil, entre señoras, criadas y esclavas. Moctezuma elegía a su voluntad a las que le parecían más adecuadas.
A otras las entregaba como esposas a sus criados y a otros caballeros y señores. Se cuenta que hubo ocasiones en las que tuvo a ciento cincuenta mujeres embarazadas al mismo tiempo”, menciona.
Todas las mujeres habían sido seleccionadas personalmente por el tlatoani y vivían bajo el mismo techo, en un complejo residencial que no era simplemente una mansión.
Este lugar, conocido como Tepac, que significa “palacio”, contaba con 20 puertas hacia plazas y calles públicas, tres amplios patios y una gran fuente en uno de ellos. Además, disponía de 100 habitaciones de 25 y 30 pies de largo, así como 100 baños.
¿Qué nombre tenía la camisa de las mujeres aztecas?
La indumentaria de las mujeres incluía una falda llamada cueitl, que consistía en una larga manta rectangular enrollada alrededor de la cintura.
El torso se cubría con una camisa conocida como huipilli (también llamada “huipil” en español mexicano), ya sea corta o larga, o una camisa puntiaguda llamada quechquemitl. Estas prendas podían ser adornadas de manera elaborada.
Conclusión:
En conclusión, la ropa usada por las mujeres aztecas era un reflejo de su rica cultura y tradiciones. Las prendas no solo eran funcionales, sino que también tenían un significado simbólico, representando su estatus social e identidad.
Esta ropa de mujer era una hermosa mezcla de colores, texturas y diseños intrincados que eran exclusivos de la civilización azteca.
A pesar de que los aztecas se han ido hace mucho tiempo, su legado sigue vivo a través de su arte, cultura y moda, inspirando a las generaciones venideras. Si deseas más información visita el sitio web Elpoderestuyo.mx.